Conocer a la gente no es tan difícil como piensas.

-¿Cómo dices que conoces tan bien a las personas?
- Pues es fácil, solo hace falta tener buena vista y millones de experiencia.
Mira vez a aquella chica con gafas y una camiseta azul, pues esa chica se siente tan vacía, tan incomprendida que llora todos los días en su casa ¿no le ves la cara algo roja? pues acaba de llegar del baño, acaba de llorar.
-Wow, si que eres buena, dime más.
- Pues aquel chico es el típico chulo de clase, el que dice tener a todas detrás de él, miente. Todavía no se ha besado por primera vez y solo tuvo una novia cuando pequeño. Pero como tiene algo  de músculos pues le hace como un escudo, se protege en eso, además como nadie sabe su vida no pueden decirle nada al respecto. Aquellas chicas de allí se pelean cada dos por tres por estupideces pero cuando están bien son muy felices juntas. Yo les aconsejaría que no se peleen tanto y que disfruten una de las otras, quien sabe cuando se van a separar definitivamente. Esa chica gordita que todo el mundo se mete con ella, tiene un problema por el cuál no puede adelgazar, pero también es genética. Aquella chica sufrió trastornos alimenticios, hace tan solo un año estaba anoréxica y por poco no se muere en la habitación del hospital. Por culpa de unos idiotas que la insultaban decidió no comer más y estaba en los huesos. Aquellos dos, la primera vez que me vieron me saludaron tan emotivos que parecía que me conocía de toda la vida, y es que hay gente tan sumamente simpáticos que lo único que quieres hacía ellos es el bien. Aquel chico, parece que no pero si quisiese podría tener a todas las chicas del mundo detrás suyo. Aquella chica hace como que la que va a su lado es como su mejor amiga, están todo el día hablando y tal, la única y sincera verdad es que nadie la quiere en un grupo de amigas, estaba sola hace unos meses pero apareció esa otra chica y a ella no le cae muy bien pero como la acompaña en los recreos y demás, hace como si le cayese fenomenal.
-Vaya, me dejas impactado.
-Esto es solo una pequeña muestra de que conocer a la gente es, sinceramente, muy fácil. Por su ropa, su manera de transmitir, de expresar, su cara, por todo eso eres capaz de saber lo que piensa o lo que le pasa a ciertas personas. Con esto también te quiero decir que no somos nadie para meternos en la vida de los demás, que como ves todas las personas demuestran ser una especie de persona que no es por el simple hecho de que si demuestras tu verdadera identidad te pueden insultar y demás.

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Te miras al espejo. Una, y otra, y otra vez. Miles de veces. Primero te quitas los pantalones vaqueros. Luego la camiseta y te quedas completamente desnuda. Te vuelves a mirar. Te haces un moño bien alto. Y te miras. Miras de pies a cintura. Nada, no hay ni una sola cosa que te guste. Ahora más hacia arriba, de cintura a hombros. Puaf hemos empeorado. Ahora te miras de hombros a cabeza. Los labios, la nariz, los ojos. Ves una lágrima, que cae por tu cara. Después va otra seguida. Parece una carrera de lágrimas. Te miras una vez más de arriba a abajo y de abajo a arriba. Brazos, pies, piernas, barriga. Nada. Sigue igual.

Esa noche no tienes ganas de comer, calmas tu apetito con un vaso de agua y te vas a la cama. Son las 10.00 de la noche, demasiado temprano, pero no quieres nada. Decides ponerte música. Ni si quiera te anima un poco. 

Ya ha amanecido y no has pegado ojo. La letra de human se te ha metido en la cabeza y no hay quien te la quite. Te haces las dormida ya que tu padre entra en tu cuarto. Levanta hija, llegarás tarde a clase. Decides levantarte y ponerte el uniforme del colegio. No quieres ni mirarte al espejo pero tienes que hacerlo. Te dejas el pelo suelto, hoy no tienes ganas de que te miren mucho la cara. Pero, ¿y esas ojeras? Te echas maquillaje pero no se van. No tardes más, venga. Te montas rápido en el coche y al llegar, llegas tarde a clase. Te mandan a la biblioteca. Allí le pides a la jefatura de estudios si puedes ir al baño, y cuando vas se te cae un mar de lágrimas. ¿Y ahora? ¿A que viene?. Te secas, te mojas la cara pero sigues estando roja, tienes los ojos hinchados y rojos. Vuelves. ¿Te ha pasado algo?. No es solo alergia- le contestas. 

En los minutos del recreo te lo has pasado en el baño encerrada, coges el móvil. 0 notificaciones. Lo normal. A la primera hora después del recreo, la profesora te ve con una cara algo pálida y los ojos aún más hinchados. Por lo cual decide llamar a tu padre para que te venga a recoger. Acabo de llamar a tu padre para que venga a recogerte, te veo muy pálida y puede que estés cogiendo gripe. No le contestas porque sabes que terminará en bronca y eso es lo que menos quieres ahora. Te vas a tu casa sin echarle ni puto caso a tu padre que te ha preguntado mil veces que si te pasa algo, si te encuentras bien. Te encierras en tu habitación, te pones cómoda y te tumbas en tu cama. No estas cómoda. Tienes hambre, pero no vas a comer, te ves demasiado gorda para comer algo. Siempre lo han dicho ''Un poquito en la boca, el resto de tu vida en el cuerpo''. Te quedas dormida. Algo más tranquila. 

Pasan los días, no comes nada más que una torta de maíz sin grasas y un vaso de agua. Una semana más tarde, te echas en tu cama como de costumbre y cuando te despiertas estás en una habitación blanca, te miras el brazo y te ves un tuvo en tu brazo. ¿Es que me han metido comida por ahí?. Quieres gritar, preguntar pero no te salen palabras. Tus padres te ven, pálida, con ojeras ahí tumbada en esa cama. Hija. La haces callar, pero ella te explica todo. Tu padre y yo te vimos algo rara la última semana, estabas siempre pálida y con muchas ojeras y pensábamos que algo malo te estaba pasando, no tenías apetito y te dormías a las tantas y te despertabas por las noches. Ayer noche, decidimos traerte aquí pero estabas como anestesiada y no te acordarás de nada. Te han hecho pruebas y lo que pasa es que estás desnutrida por eso te han inyectado suero para que tengas algo en el cuerpo y no solo agua. ¿Todo eso ha pasado mientras estaba dormida?. 

Empieza a sonar un pitido, tu madre se te echa encima en la camilla llorando, tu padre abraza a tus hermanos y llegan enfermeras que intentan reanimarte, pero no lo consiguen. Tu ya llegaste al fin. Tu fin. Solo quieres despedirte de ellos, tu familia, pero ya es tarde. 

*CON ESTA ENTRADA SOLO QUERÍA DECIROS QUE NO DEJÉIS DE COMER, NO DEJÉIS DE LADO LA COMIDA POR EL SIMPLE ECHO DE VEROS GUAPAS. SOIS COMO SOIS Y QUIEN NO OS QUIERA PUES QUE SE VAYA A DAR UNA VUELTA. ACEPTAROS TAL Y COMO SOIS COMO YO ESTOY INTENTANDO HACER CONMIGO MISMA. ESTO LE HA PASADO A MILES DE PERSONAS, SEGURO, NO QUIERO QUE TU SEAS UNA DE LAS SIGUIENTES. UN BESO.*

No te rindas.

Venga joder, levántate- le dije - No has llegado hasta aquí para rendirte.

Ella, una chica tan normal algo fuera de lo común, cabezona e insegura de sí misma. Es inquieta y algo tímida. ''No te rindas ahora, llevas mucho camino recorrido para parar en seco, para frenar y para dejar atrás todo aquello que por un día te hizo feliz. Deja que esos capullos digan lo que les de la gana. Tú me dijiste que si por cualquier motivo me caigo, que tu me das tu mano para ayudarme a levantarme, ahora soy yo la que te da mi mano, mis ánimos y si hace falta  mi hombro para que llores. Pero no quiero oír de esa boca. Esa boca de la que he oído miles de estupideces, esa boca de la que han salido por sí sola miles de sonrisas sin motivo solo por el echo de ser feliz. No quiero ni pienso oír que no puedes, de que estas sola hundiéndote en esa mierda. Sal ahí demuestra que tú vales mucho más de lo que esa gentuza dice sobre ti. Sal ahí y pon una de tus sonrisas, falsa si quieres, pero sácala. Eso es lo que más jode. Demuestra que esas palabras no son cuchillos para ti, y aunque lo fueran, demuestra que tienes un escudo anti-cuchillos.
Sécate las lágrimas, levántate de la cama, ponte una de tus mejores galas, maquíllate como nunca antes y sal. Para que todo el mundo pueda ver a esa chica tímida e inquieta de nuevo sonreír.''

Soñar mi vida y no vivir mi sueño.

Con un vaso de vodka en mis manos y un cigarro entre mis dedos. Sentada en aquel pequeño banco de aquel enorme parque donde montábamos las grandes fiestas en aquellos tiempos donde con alcohol eramos los más felices, cuando ponerte ciega era culpa de los retos de tus amigos. Cuando quedábamos y no éramos felices sin una puta botella de vodka o ron o simplemente whisky y con un paquete de cigarros. Ahora estoy sola, ahí recordando los jodidos retos. Ahora estoy  emborrachándome yo sola y poniéndome ciega con un paquete de tabaco. Si voy a morir que sea recordando mis mejores, por así decirlo, momentos. Mañana será otro día. O eso pienso. A lo mejor de la noche a la mañana todo ha cambiado. A lo mejor me puedo escapar de esta triste realidad. A lo mejor me puedo ir tan lejos, que seré feliz de nuevo. Coger el primer vuelo que salga en la pantalla gigante del aeropuerto, y marcharme. Alejarme de todas las personas que amé por alguna absurda razón, de todas las personas que me hacen daño día tras día. Y ser feliz. Feliz por un tiempo o feliz para siempre. Pero feliz. 

Quizá este haciendo el tonto, o quizás estoy sacando las cosas de quicio. Pero no puedo más, yo me conozco y no puedo más. 

Ancianos que pasan enfrente de mí haciendo su rutina de ejercicios y me miran raro. Gente que pasa y me ve y dice en bajito ''Mejor pegarle un tiro y que se muera ya en vez de perder el tiempo y el dinero en eso''  Qué verdad. Niños que vienen hacia mí diciendo ''¿Estás malita y por eso te tomas ese jarabe?'' ¿Pero que clase de padres les dice a sus hijos que el alcohol es jarabe? 

Mientras sueño mi vida y no vivo mi sueño. Mientras destruyo mi cuerpo por dentro. Mientras tanto vosotras/os sed felices.

Lo triste es que nada cambia.

Sentada en su sillón favorito, leyendo sus historias de amor que tanto sueña con hacerlas realidad. Lee y lee hasta que se le cierran los ojos y un pequeño ladrido le hace abrirlos de nuevo. Se levanta y le pone la correa a ese pequeño, sale a la calle para que haga sus necesidades y lo vuelve a meter en casa. Se va hacia la cocina, prepara una taza de té, vainilla a elegido esta vez. Y vuelta a su sillón. Vuelve a leer. Ya va por el capítulo quinto. ''Sonríe pequeña, no todo lo bueno está en el amor''. Que cursi le parece aquello. No le va lo cursi.

Rutina. Jodida rutina. Desde que se levanta a las 8 de la mañana hasta que se acuesta a las 12. Siempre la misma rutina. Se prepara un cola-cao caliente, con dos galletas digestiva, ve un rato la tele y saca al pequeño, al perro, vuelve a su sillón y se queda pensando en las cosas que le gustaría que pasaran, pero no pasan. Lee, libros de amor, libros que todo lo dicen. Libros, que le dan envidia lo que escriben.


Decidido. Lo tiene más que claro. Se va a ir de escapada. ¿A quién le importa?. Coge su maleta pesada y mete ahí ropa y los zapatos en una bolsa. De nuevo coge una bolsa aun más grande para meter comida de su perro. Sus libros, que no falten. También coge dos juguetes del perro, una pelota azul llamativa que le encanta a él y un peluche que tiene un pito. Lo mete todo en el capó del coche. Un pequeño silbido y el sonido de la correa del perro. ''Buen chico'' le dice. Cierra las dos cerraduras de la casa después de ver si ha cerrado las ventanas. Mete al perro en el coche y este se tumba en una manta que tiene su dueña puesta para no llenar el coche de pelos. Después va ella. Arranca y comprueba que hay gasolina ''Joder, si que tragas gasolina'' le dice al coche. Se dirige a la gasolinera y le hecha, por así decirlo, de comer al coche. Tras esto se dirige a donde quiera que sea  en dirección de pasarlo bien por algunos días.

*

Idiota, tonta, estúpida, odiosa, caprichosa, impertinente, cariñosa, borde, contestona... La verdad es que soy muchas cosas a la vez. Algunas veces actúo sin pensar, sin pensar en las consecuencias que vienen después y luego me arrepiento. No sonrío muy a menudo, solo si me hacen reír de verdad. También lloro muy a menudo, pero no soy la típica chica que llora en medio de toda la gente, solo lo hago en mi habitación alejada de todas las personas para que no me pregunten el porqué de mis lágrimas. No me va la gente cursi. Odio lo cursi. La verdad soy ese tipo de chica a la que le gusta el chocolate y las que se levanta a las tantas. 

Nunca he llorado por un tío que no se merece mis lágrimas, ¡el rimel está muy caro!

Tampoco soy una chica difícil, se me hace feliz con poco. Pero últimamente como que nada me hace feliz. 

Aunque prefiera reír que llorar, lloro muy a menudo. 

*

¿Tú nunca has necesitado a un alguien que esté a tu lado y que cuando necesites explotar, explotes con ella? ¿Tu nunca has querido que te dieran abrazos sin motivo? ¿Tú nunca matarías por un beso robado del chico que te gusta? ¿Nunca has querido ser, por lo menos en algo, igual que tus llamadas amigas? ¿Nunca deseaste cambiar de vida? ¿No pensaste nunca en como sería tu vida en otra familia?

Yo lo hago a menudo. Pienso. Pienso. Y luego existo. Me tumbo en mi cama, con música en mis oídos, cierro los ojos o los dejo abiertos, depende de como esté ese día y imagino un mundo de fantasía, un mundo en el que solo estamos, él, yo, y las personas que más me importan. Imagino que un día, así de la nada el chico que más me gusta viene hacia mi y después de decirme un 'hola idiota, hoy estás muy guapa' me planta un beso en la boca. Imagino que en la tarde del domingo me siento con aquella chica. Mi mejor amiga, si es que algun día llego a tener, y le empiezo a contar todas las cosas que tengo metidas dentro de mí y que no me deja pensar con claridad, que me ayude y yo ayudarla a ella. Imagino que cuando este con todos mis 'amigos' alguien que de verdad me conociese y viese que mi sonrisa es falsa venga a mi y me de un abrazo inesperado. Imagino que en vez de ser como soy, físicamente, soy la tía más buena de todo el insti, con muchos kilos menos y con más tetas. Con mi personalidad cambiada y con la mente mucho más positiva. Imagino como sería conocer a gente nueva, que te aceptase tal y como eres tu, con tus defectos y con tus pequeñas virtudes. Que te quiera. Que te de abrazos. Y que puedas llorar delante de ella sin que te pregunte ¿por qué esas lágrimas? puesto que ya lo sabe porque te conoce como la palma de su mano. Imagino como sería convivir con otra familia, aunque eso es difícil, pase lo pase mi familia es mi familia.

Siempre he soñado con vivir otra vida, con ser diferente y que la gente que me rodease me aceptase por mi actitud ante ellos y mi personalidad no por lo kilos que tenga. Siempre he soñado con todo lo anterior. ¿Y tú? ¿Con qué has soñado alguna vez?

Abuelo.

Hola abuelo, esto no es nada especial, solo es una pequeña carta para que sepas lo mucho que te echamos de menos y lo que en especial tu nieta te quiere. 

¿Qué tal si te escapas un ratito del cielo y me das un abrazo? Lo necesito mucho.

Puede que no te haya conocido todo lo que quisiese, que te fuiste demasiado rápido de aquí, y te fuiste muy lejos de nosotros. Sinceramente por lo que me cuentan día a día de ti, parece que eras un hombre serio pero que en el fondo tenías un buen corazón. Cuando miro a mi padre, no sé porque, te veo a ti. Me encantaría celebrar un cumple años más contigo. Recordar anécdotas y ser feliz a tu lado tan solo por un día. Te extraño. Escápate de ahí arriba, anda. 

Se me forma un nudo cada vez que pienso en ti, y no te creas que no, pero muchas veces se me ha escapado una lágrima. No me gusta llorar delante de mi padre puesto que es tu hijo y se pondría peor y no quiero verlo mal. 

Solo quiero decirte, que te quiero muchísimo y que me encantaría que estuvieras aquí conmigo para que me des un abrazo de esos de abuelos que lo necesito. También decirte que aquí abajo estamos todos bien y que se que en el fondo te extrañamos todos. No deberías estar ahí arriba habiendo tantos idiotas aquí abajo.

PD: te quiero.

Ask.fm

Solo hago esta pequeña entrada, para que sepáis que tengo ask.fm y solamente quiero que os paséis por ahí y si queréis algún texto o cualquier duda y tal (aun que tenéis los comentarios de aquí) pues que me la preguntéis por ask.

ask.fm/Poolfrank

HOPE.

Me siento en el banco de aquel parque en el que disfrutaba tanto cuando era una niña. Me vienen todos los recuerdos de aquel momento en el que una tierra era muy divertido, y jugar a ser mayores lo era aun más.

Llego a mi casa y me encierro en mi habitación, como de costumbre, no quiero hablar con nadie. Me siento vacía, sin cariño y sin ganas de dar cariño. Realmente pienso que mi perra es la única que me mira con cara de deseo y la única que me quiere en este mundo. Jodido mundo.

Mis cascos y mi música son mis mejores amigos ahora mismo. No tengo ganas de nada. Solo de quedarme ahí, contemplando fotos antiguas y escuchando canciones tristes. Pero, ¿por qué escucho yo esto? me pongo aún peor. Sin darme cuenta, se me cae una lágrima que va cayendo lentamente sobre mi parte derecha de la cara, llegando hasta mi barbilla que ahí cae hasta mi pecho. Una foto. Tan solo una foto. De aquel momento. De aquel instante con mis queridas amigas. ¿Podré llegar yo a ser algún día tan delgadas como ellas? ¿Tener tantas tetas?.

¿Celos? No, para nada. Simplemente envidia. Sí. 

-¡LAAA CENAAAA!- grita mi madre.

-¡NO TENGO HAMBRE!- la imito.

Lo único que quiero es que pase ya este día. 

Las 23.30h de la noche. ¿Qué hago con mi vida? Llevo todo el día tumbada en la cama, escuchando música. Solo he parado para hacer deberes y no sé ni porque me paro si hasta mi profesora de matemáticas me tiene asco. 

¿Cambiará mi vida en algún momento? ¿Seré feliz por un día completo, alguna vez?

¿Quién dijo que sería fácil?

Sentada en la silla incómoda de tu habitación, mirando hacia la ventana, recordando todo lo que por tu vida paso y te hizo feliz durante unos minutos. Te acuerdas de cuando eras niña y jugabas con tus amigas a ser mayores, a poder salir de tu casa sin tus padres, volver tarde y hacer todo lo que los mayores hacían y que parecía divertido. Te acuerdas de los enfados tontos que tenías con tus amigas por que muñeco elegir en el juego de ''mamás'', de todas esas noches que soñabas cosas malas y te ibas a la cama de tus padres. 

De las ganas que tenías de crecer, para hacer cosas diferentes, cosas de mayores...

¿Dónde quedaron todas esas ganas de crecer? ¿Es que se han esfumado?

Ahora los grandes queremos ser pequeños otra vez, pero, que mala suerte que no hay máquinas del tiempo.

Me encantaría volver a esos tiempos en los que nada te importaba. Te dabas besitos con niños tan solo porque eran tus amigos y nadie te decía nada. En aquel tiempo en el que jugar era tu mayor hobbie. Aquellos tiempos fueron bonitos, tiempos que no volverán a nosotros, se han ido tan rápido...

Ahora lo único que nos toca es afrontar que somos adolescentes y que tenemos que vivir una serie de problemas que cada día se nos cruza por el medio.

¿Quién dijo que esto de crecer sería fácil?

Lágrimas en dirección de ningún lugar.

Estoy cansada de llorar por todo. Tengo la cara roja. Mis ganas de comer disminuyen.

Este jodido mundo me está volviendo loca. No quiero despegarme de mi ordenador, donde me desahogo, y de mi cama. Tengo energía acumulada para un año por lo menos.

''No, no quiero cortarme'', piensa mi corazón.

''Síí, hazlo, te librarías de este mundo'', piensa mi cabeza.

¿A quién le hago caso? Durante mucho tiempo le llevo haciendo caso a mi corazón, pero es que son ya tantas las noches en las que estoy encerrada en mi habitación llorando que mis ganas de desatornillar un sacapuntas y cortar mis venas, aumentan, lo juro.

No deseo el mal a nadie, ni si quiera a mi peor enemigo, pero es que desearía que esto que me sucede a mí, le sucediese a otra persona. O simplemente a nadie.

''Jodidos superficiales, ¿no tenéis a otra con quién jugar? ¿Tengo que ser yo?''

Y sigo llorando, en mi cama, con los cascos puestos, escuchando canciones lentas, de amor, de tristeza.

Miro hacia un lado, ahí está mi perra, dormida. Se la ve con una cara de felicidad máxima, y tanto que lo es, nadie se puede meter con ella por el simple hecho de que seas de constitución... ¿pero que estoy hablando? por el simple hecho de que seas una gorda a la que nadie quiere. A ella todo el mundo la quiere. Hasta desconocidos que pasan por la calle. Que me gustaría tener una vida perruna.

''A Thousand  Years'' pedazos lagrimones que hecho con esta canción, pero si no entiendo ni la mitad de lo que dice ahí, creo que lloro solo por que es una canción lenta. ¿Amor? dejé de sentir eso cuando nadie, del sexo opuesto, me quería como novia, creo que desde los ¿5? ¿6? no sé.

Supongo que me toca vivir esta sensación de vacío durante mucho, mucho tiempo. En fin, soy adolescente.

Esta vez sí. ¡Vuelvo a blog!

Buenas noches, no sabíais las ganas que tenía de volver a escribir, de volver a contaros cosas, de volver a blogger. Esta vez mi blog a cambiado mil. He borrado todas las entradas anteriores puesto que empezaré de ''nuevo'' aquí:

-Tenemos diseño nuevo.

-Nuevas entradas.

-Nuevas sonrisas que sacar.

-Escribiré una novela.

Y creo que se me olvida algo pero no lo recuerdo.

Mil besitos aplastantes.